Los futuros prodigios de la tecnología iraní compiten con sus robots en un ring
Dos máquinas con aspecto de robots aspiradores se enfrentan en un ring rodeado por cristales de plexiglás. Son parte de las Olimpiadas Tecnológicas de Irán, un evento que impulsa los futuros talentos de la ingeniería en el país.
La República Islámica aspira a convertirse en un actor regional clave en el ámbito de las tecnologías emergentes, a pesar de décadas de sanciones internacionales.
Las Olimpiadas Tecnológicas, creadas en 2024 por iniciativa del gobierno, sirven de cantera de talentos para las empresas en busca de candidatos.
El certamen, que finalizó el jueves, duró cuatro días y no solo incluyó competiciones entre robots. Otras disciplinas como la programación, la inteligencia artificial (IA), los drones, la ciberseguridad y los objetos conectados estuvieron presentes.
Bajo una carpa, Alireza Hosseini se afana en dar los últimos retoques a Arash, un robot de combate que subirá al ring en unas horas.
La máquina no tiene nada de humanoide. Su aspecto es muy rudimentario, con una correa, ruedas y mucha mecánica.
"Lo más importante, más que el diseño, es el operador", la persona que controla el robot con un mando, explica a la AFP este estudiante de 21 años.
"El diseño solo representa un tercio del trabajo, pero el operador decide cómo y dónde ataca el robot", subraya el joven, originario de Kerman, en el sur de Irán.
Su equipo, "formado por estudiantes de ingeniería eléctrica, electrónica, informática, mecánica y diseño", ha sido tres veces campeón de Irán de robótica, precisa.
- El Silicon Valley iraní -
Irán invierte cantidades considerables en tecnologías emergentes, entre ellas la robótica, que cuenta con decenas de empresas con aplicaciones muy diversas.
El país presentó en septiembre su primer robot dotado de inteligencia artificial, capaz de responder con precisión a una amplia gama de preguntas jurídicas, según los medios de comunicación locales.
Estas tecnologías también se utilizan en el ámbito militar, como Aria, un vehículo presentado en septiembre por los medios de comunicación estatales y capaz, gracias a la IA, de detectar obstáculos y desplazarse de forma autónoma.
En 2021, un grupo de veterinarios realizó en Irán la primera operación a distancia en un perro gracias a Sina, un robot quirúrgico diseñado y fabricado íntegramente en el país.
Las Olimpiadas Tecnológicas se celebraron en las afueras de Teherán, en el parque tecnológico de Pardis, conocido como el "Silicon Valley" iraní, donde se han instalado decenas de empresas punteras.
Los organizadores aseguran que este año recibieron más de 10.000 solicitudes de inscripción. Pero el certamen está limitado a 1.000 plazas tras las pruebas eliminatorias. Algunos equipos extranjeros estuvieron representados.
Azizi, un profesor que entrena a un equipo de menores de 18 años, parece algo nervioso antes del inicio de la competición.
"Por desgracia, hemos empezado tarde y el robot aún no está del todo listo". Mientras habla, dos máquinas intercambian golpes en el ring.
Cada choque entre robots provoca chispas. De repente, la estructura metálica de uno de ellos se incendia. La victoria es para el aparato que deja fuera de combate a su oponente.
Las olimpiadas permiten a los estudiantes enfrentarse a la realidad del terreno.
Es el caso de Mohammad-Javad Assadolahi, un estudiante de ingeniería mecánica de 21 años que, junto con sus compañeros, ha diseñado desde cero un dron compuesto en un "60-70 % por tecnología iraní".
"Nuestra principal dificultad fue la falta de recursos pedagógicos" en inglés y farsi, lamentó el joven, en referencia al idioma principal que se habla en Irán.
Pero "gracias a nuestros conocimientos y nuestras investigaciones, poco a poco logramos desarrollar un sistema" que permite al dron despegar automáticamente, seguir una trayectoria rectangular y aterrizar por sí solo, se congratuló Assadolahi.
F.Colin--PS