
Encargados de "operaciones de desinformación" irán a juicio por la presunta trama golpista en Brasil

La corte suprema de Brasil decidió este martes enjuiciar a varios exmilitares y agentes de inteligencia brasileños encargados de "operaciones estratégicas de desinformación" en el marco de una supuesta trama golpista liderada por el expresidente Jair Bolsonaro.
El presunto plan buscó impedir la asunción del izquierdista Luiz Inácio Lula da Silva luego de que derrotara a Bolsonaro en las elecciones de octubre de 2022, de acuerdo con la fiscalía.
Por unanimidad, los jueces de la primera sala del Supremo Tribunal Federal (STF) decidieron llevar a juicio a los siete integrantes del llamado "núcleo 4" de la tentativa golpista, en un paso más del proceso contra el ultraderechista Bolsonaro (2019-2022), quien también será enjuiciado en una fecha por definir.
Entre los acusados se encuentran los militares retirados Angelo Martins Denicoli y Ailton Gonçalves, así como el policía Marcelo Araújo Bormevet y el subteniente del ejército Giancarlo Gomes, ambos con cargos en la Agencia Brasileña de Inteligencia (ABIN) al momento de los hechos.
Según la acusación, en complicidad con otros subordinados de Bolsonaro, propagaron noticias falsas sobre el proceso electoral y realizaron ataques virtuales a instituciones y autoridades que amenazaban los intereses del grupo, entre ellos, jueces del STF.
"La mentira es un veneno político plantado socialmente y divulgado exponencialmente a través de las redes, por plataformas y nuevas tecnologías que hoy son grandes problemas", dijo el martes durante la audiencia la magistrada Cármen Lúcia.
En total, 21 personas serán enjuiciadas en este caso. Una docena más podría correr el mismo destino cuando la corte revise sus expedientes entre el 20 y el 21 de mayo.
Como el expresidente Bolsonaro, se exponen a penas de hasta 40 años de prisión por los delitos de tentativa de abolición violenta del Estado democrático de derecho y organización criminal armada, entre otros.
El presunto plan habría fracasado por falta de apoyo de los comandantes del ejército y de la fuerza aérea, según la fiscalía.
En un país todavía marcado por la memoria de la última dictadura militar (1964-1985), el juicio contra el expresidente de 70 años y nostálgico de ese período sacude la vida política.
Bolsonaro se dice inocente y víctima de una "persecución".
El exmandatario fue dado de alta el domingo luego de tres semanas hospitalizado por una cirugía abdominal para solucionar complicaciones derivadas de una puñalada que recibió durante la campaña presidencial de 2018.
Inhabilitado electoralmente por cuestionar el sistema de votación y a las puertas de su juicio, Bolsonaro se mantiene como el principal líder de la derecha brasileña e insiste en ser candidato a las presidenciales de 2026.
P.Roux--PS