Cassie Ventura, dijo en juicio a su expareja Sean Combs que sufrió un calvario sexual "repugnante"
La artista y modelo Casandra "Cassie" Ventura contó este martes en el juicio contra su expareja Sean "Diddy" Combs el "repugnante" calvario sexual al que la sometió. "Controlaba gran parte de mi vida", confesó la mujer sobre el magnate del hip-hop.
El testimonio de Ventura es la columna vertebral de este caso contra Combs, acusado de asociación ilícita y tráfico sexual, cargos por los que puede pasar el resto de su vida entre rejas si es declarado culpable.
Una demanda de Ventura contra el rapero de 55 años, en 2023, por agresiones sexuales y violación ha terminado sentándolo en el banquillo pese a que retiró unos días después las acusaciones tras un acuerdo extrajudicial. A esa demanda le sucedieron una lluvia de denuncias de otras víctimas.
Los miembros del jurado que sellarán su suerte al término de ocho o diez semanas de juicio han escuchado de la fiscalía la doble vida del rapero: mientras en público era un respetado músico y empresario exitoso, en privado recurría a la violencia, el sometimiento y el chantaje para manipular a las mujeres, incluida Ventura, de las que supuestamente abusó durante años.
Ventura conoció a Combs en 2005, cuando tenía 19 años. "Solo sabía que era un empresario y un músico fuera de lo común", reconoció. Poco después, firmó un contrato para publicar 10 álbumes con su discográfica, Bad Boy (Chico Malo).
Esta madre de dos niñas y en avanzado estado de gestación ofreció detalles escabrosos de las orgías salvajes ("freak-off") que a veces duraban varios días de manera continuada a golpe de drogas como éxtasis y cocaína, en las que participaba porque estaba "simplemente enamorada y quería hacer feliz (a Combs), hasta el punto de que no sentía que tuviera muchas opciones".
Contó que Combs le orinaba encima, observaba a su pareja manteniendo relaciones sexuales con terceros, contrataba a trabajadores del sexo y pagó hasta 6.000 dólares en efectivo a los participantes en las orgías.
"Sean controlaba gran parte de mi vida, ya fuera mi carrera o mi forma de vestir", dijo la testigo que regresa este miércoles al estrado.
- "Repugnante" -
"Era repugnante. Era demasiado. Era abrumador", dijo, antes de añadir que las habitaciones de hotel utilizadas para las maratonianas sesiones de sexo solían quedar destrozadas, y que los establecimientos cobraban considerables facturas de limpieza y reparación.
"Me golpeaba en la cabeza, me botaba al suelo, me arrastraba, me pateaba, me pisoteaba en la cabeza si estaba en el suelo", dijo, con la voz temblorosa por momentos.
Un vídeo de una cámara de seguridad de un hotel de marzo de 2016 que la fiscalía proyectó la víspera en la sala del Tribunal Federal del Distrito Sur de Nueva York, muestra al empresario golpeándola brutalmente y arrastrándola del cabello por un pasillo.
Según el exagente de seguridad del hotel de Los Ángeles donde se produjo la agresión, Israel Florez, tras acudir al lugar al recibir una llamada, Combs trató de sobornarle con un fajo de billetes para que mantuviera silencio.
Sin embargo, en medio de las lágrimas, Ventura dijo que "el tiempo pasado con (Combs)" fue agradable.
- "Relación tóxica" -
Los abogados de Combs reconocieron que aunque parte de su comportamiento es cuestionable -en ocasiones constitutivo de maltrato doméstico-, no es una prueba de las acusaciones que le han sentado en el banquillo.
La fiscal Emily Johnson explicó al jurado que Combs utilizaba una red de empresas y empleados para satisfacer sus deseos, un punto clave de las acusaciones de chantaje.
Sin embargo, para Teny Geragos, abogada de la defensa del ganador de un Grammy, el caso es más bien sobre "amor, celos e infidelidad y dinero".
Sus acusadoras son "mujeres adultas, capaces y fuertes", y aunque la relación con Ventura, con la que estuvo más de una década, era "tóxica", eran "dos personas que se amaban", sostuvo la abogada, que admitió posible violencia doméstica en la relación, pero Combs no está acusado de ello.
"Ser un participante voluntario en tu propia vida sexual no es tráfico sexual", sostuvo.
Otro de los testigos que ha pasado por el estrado, Daniel Phillip, de 41 años, dijo haber mantenido relaciones sexuales, a menudo a cambio de dinero, con Combs y Ventura desde 2012 hasta aproximadamente finales de 2013. "Tenía un poder ilimitado", dijo del rapero.
Q.Mathieu--PS